miércoles, 3 de mayo de 2017

La noche estrellada Van Gogh



1. Identificación: 
Nombre: La noche estrellada
Autor: Van Gogh
Cronología: 1889
Localización: Museo de Arte Moderno de New York
Estilo: Neo-impresionismo
Material: Oleo sobre lienzo

2. Descripción de la obra:
 Esta obra nos muestra una vista nocturna de Saint Rémy. Concretamente es una vista desde la ventana de su habitación en el manicomio de esta localidad donde se encontraba recluido.
La obra se divide en dos planos diferenciados, separados por la línea de las  montañas. Más de la mitad del cuadro lo ocupa el cielo estrellado siendo el auténtico protagonista del cuadro.
En la mitad inferior del cuadro se observa el pueblo cuyas casas aparecen representadas con trazos rectos y del que sobresale el campanario puntiagudo, elemento vertical que rompe la horizontalidad de la composición. 
 En un primer plano apareces unos cipreses,que adquieren formas ondulantes que les asemejan a llamas, elevándose y uniendo ambos planos.

Las líneas de las montañas del horizonte se ondulan a semejanza del cielo en una dirección ascendente de izquierda a derecha.
En el cielo observamos como dos espirales se envuelven mientras once estrellas parecen iluminar la noche. A nuestra derecha, un astro de mayor tamaño de color naranja, quizás la luna, parece confundirse con el sol. 
La técnica usada por el pintor es el óleo, aplicado en abundancia, técnica del empaste, con pinceladas vigorosas y cortas que contribuyen a la fuerza expresiva de la obra. La gama cromática usada por Van Gogh es fría con predominio de azules, celestes, verdes y grises, aunque también como contrapunto cromático usa el naranja y amarillo de las estrellas, colores complementarios al azul dominante en la obra.
Se observa como el color, la mancha aplicada con el pincel en pequeñas pinceladas, alargadas y rectas unas veces, cortas y onduladas otras, sustituye al dibujo de manera que tan sólo algunas líneas oscuras sirven para dar forma precisamente a los elementos más físicos y materiales del cuadro, como las casas del pueblo, las montañas o los cipreses.

3. Interpretación de la obra:
Esta obra de Van Gogh, una de las más complejas de analizar, muestra como Van Gogh, recluido y víctima de su enfermedad usa la pintura para mostrar más que la realidad observable y cambiante, como había sido el motivo de los pintores impresionistas, su visión de la misma realidad, alterada por sus sentimientos desbordados. Así, Van Gogh, partiendo del impresionismo se anticipa a lo que será el expresionismo, como podemos observar en esta extraordinaria obra hoy día conservada en el MOMA de Nueva York.

martes, 2 de mayo de 2017

El Guernica.

autor: Pablo Picasso.
técnica : oleo sobre lienzo
época: 1937
tema: horrores de la guerra 
localización: se encuentra en el museo reina sofia de Madrid 
estilo: cubismo.


Este cuadro se realizo para el pabellón de la  segunda república española en la exposición universal de parís. 
El tema son los horrores de la guerra ocasionados en la ciudad de Guernica  por el desastre de la guerra civil.
Se centra en crear un cuadro de simbolismos y figuras con motivo del bombardeo, Guernica deja de ser un cuadro histórico para convertirse en un grito contra la guerra desde el punto del vista de la víctimas, una reflexión sobre la destrucción y el dolor.
Los personajes que aparecen son todos victimas, en la izquierda aparecen un toro (como simbolismo de España), un pájaro sobre la mesa, una mujer con su hijo muerto entre los brazos y una estatua mutilada. El centro lo ocupa un caballo herido (símbolo del pueblo español) que pisotea el brazo de la estatua que sostiene una espada rota y una flor. Sobre ellos aparece un ojo-sol con una bombilla como pupila (representando la esperanza). En la zona derecha se encuentran tres mujeres, una que avanza hacia la luz, otra que porta un candil y en el otro extremo, otra con los brazos en alto, gritando en medio de las llamas.
 La composición recuerda a la de los trípticos, dividida en tres sectores. El central en una forma triangular en torno al caballo, incluyendo en su zona baja la estatua y la mujer que avanza. En los laterales de este grupo central se crean dos triángulos rectángulos que se compensan en sus figuras.
En el podemos descubrir experiencias anteriores de Picasso, como el cubismo. Otra técnica contemporánea es que alarga a las figurasdeformandolas comvirtiendo unas cosas en otras.
El color y la luz funcionan de una forma conjunta. Picasso pensó en el cuadro como una imagen en blanco y negro que pudiera transmitir todo el clima de dolor y tragedia. El gris, en diferentes gradaciones, atempera y da cohesión a los bruscos contrastes del blanco y el negro. Se trata de una luz antinaturalista para guiarnos por el cuadro, los personajes principales aparecen iluminados, sin sombras, lo cual acentúa su bidimensionalidad.
El espacio puede resultar difícil de entender. Su extrañeza es dada por la desaparición de la perspectiva, típica desde el Renacimiento. Desde las primeras experiencias cubistas desaparece la idea del cuadro como una ventana. Ya no se pretende la representación real del mundo, y el lienzo se convierte en un espacio bidimensional que renuncia al fondo, presentándonos todas las imágenes en el mismo plano. 



En el cuadro desaparece la perspectiva, el punto de vista único y la referencia a un espacio fijo e inmutable y se inclinó por colores apagados. El Guernica participa de todas estas características del cubismo, pero también tiene rasgos surrealistas ya que parece una imagen onírica, además de expresionistas, por su intención de representar un estado del alma. Por todas características será una de las obras que más influencia tendrá sobre las Vanguardias del siglo XX.



lunes, 1 de mayo de 2017

Las Hilanderas

La fábula de Aracne, popularmente conocido como las Hilanderas, es un cuadro de Diego Velázquez , en el año 1657 , que se encuentra en el Museo Nacional del Prado, esta obra es de los máximos exponentes de la pintura barroca, su técnica es óleo sobre lienzo y mide 222,5 cm x 293 cm. Su tema es mitológico.
Durante mucho tiempo se consideró a estas Hilanderas como un cuadro de género en el que se mostraba una jornada de trabajo en el taller de la fábrica de tapices de Santa Isabel de Madrid y que este era su único asunto. Sin embargo, a causa de la propia entidad del cuadro y por la «ambigüedad» de significados presente en algunos de los lienzos más significativos de Velázquez, algunas personas, entre ellas Ortega y Gasset o el historiador del arte español, Diego Angulo Íñiguez, apuntaban a un simbolismo mitológico. En primer plano vemos cinco mujeres que preparan las lanas para la fabricación de tapices. Al fondo, detrás de ellas, aparecen otras cinco mujeres ricamente vestidas, sobre un fondo de tapices. Esta última escena sería la que da título al cuadro ya que recoge la fábula en la que la joven Aracne, al presumir de tejer como las diosas, es retada por Atenea a la confección de un tapiz. El jurado dictaminó un empate pero Atenea castigó a Aracne convirtiéndola en araña para que tejiera durante toda su vida Hoy se admite que el cuadro trata un tema mitológico: La fábula de Atenea y Aracne, en una escena del mito de Aracne que se describe en el libro sexto de Las metamorfosisde Ovidio. En el  fondo, se representa el desenlace de la fábula, frente al tapiz, se aprecian dos figuras. Son la diosa, ataviada con sus atributos (como el casco), y ante ella la humana rebelde, que viste un atuendo de plegados clásicos. Están colocadas de tal manera que parecen formar parte del tapiz. Otras tres damas contemplan cómo la ofendida diosa, en señal de castigo, va a transformar a la joven Aracne en araña, condenada a tejer eternamente. En cuanto a los colores, Velázquez usa una paleta casi monocroma, con capas de pintura finas y diluidas. Uno de los puntos más destacables de la técnica de Velázquez es la perspectiva aérea, consiguiendo un efecto «atmosférico» similar al de Las Meninas: consigue crear la sensación de que entre las figuras hay aire que distorsiona los contornos y las difumina, logra captar el espacio que arropa las figuras. El lienzo sufrió unas modificaciones cuando pertenecía a las colecciones reales.


El juramento de los Horacios

1.Identificación de la obra.
-Título: El juramento de los Horacios.
-Cronología: 1784.
-Localización: Museo del Louvre.
-Estilo: Neoclasicismo.
-Autor: Jacques-Louis David
-Técnica: óleo sobre lienzo
-Tema: inspirado en la Antigüedad Romana

2.Descripción de la obra.
Tiene una composición muy rigurosa, dividida en tres grupos perfectamente equilibrados que se refuerza con la arquitectura del segundo plano, incluyendo cada grupo dentro de un arco. Predomina la línea sobre el color, en un nuevo intento de alejarse de la pintura visual del arte barroco. Las figuras se perfilan con toda nitidez sobre el fondo oscuro y vacío, dándoles una apariencia escultórica, como si nos encontráramos ante un relieve. En cuanto a los colores se intenta buscar un equilibrio, como en la etapa clásica, entre cálidos y fríos  sin crear focos determinados. La luz proviene desde la zona izquierda, reforzando los volúmenes, y de esta manera, su sensación escultórica. Se rehuye de los contrastes excesivos que hagan perder claridad a la escena, contentándose con el fondo oscuro que más que dar emoción a la escena, la cierra en profundidad, colocándonos sobre el primer plano. La perspectiva es lineal. Las arquitecturas del fondo, unidas a las sombras bien remarcadas, crean un espacio casi teatral en donde actúan los personajes. Los personajes adoptan posturas teatrales, algo grandilocuentes, lo cual sería explicable si pensamos en el carácter moralizante del lienzo. Los gestos en los hombres son rotundos, mientras que en las mujeres podemos observar posturas más curvilíneas y melancólicas. En todas las figuras encontramos una evidente idealización. Más que personas reales, parecen actores que encarnan determinados arquetipos o ideas, siendo más importante el grupo que cada una de las individualidades (las mujeres representan la tristeza y los Horacios la determinación y el sacrificio a favor de unos ideales).

3.Interpretación de la obra.
David realiza este cuadro durante su segundo viaje a Roma. Durante esta larga estancia su pintura giró hacia un clasicismo evidente en lo que se refiere a la técnica. De esta manera se puede advertir en el lienzo claros recuerdos renacentistas al modo de Rafael e, incluso anteriores, enraizados en la escultura clásica. Desde la composición equilibrada y piramidal a la precisión del dibujo, la idealización de los personajes o el propio ambiente arquitectónico y su representación en perspectiva nos están hablando del aprendizaje clásico que realiza en Italia, siendo claves en la posterior evolución de todo el estilo Neoclásico.